LA ROSA Y EL SAPO
Había una vez una rosa muy bella, se sentía de maravilla al saber que era la rosa mas bella del jardín. Sin embargo, se daba cuenta de que la gente la veía de lejos. Se dio cuenta de que al lado de ella siempre había un sapo grande y oscuro, y que era por eso que nadie se acercaba a verla de cerca. Indignada ante lo descubierto le ordenó al sapo que se fuera de inmediato; el sapo muy obediente le dijo: Está bien, si así lo quieres.
Poco tiempo después el sapo pasó por donde estaba la rosa y se sorprendió al ver la rosa totalmente marchita, sin hojas y sin pétalos. Le dijo entonces: Vaya que te ves mal. ¿Qué te pasó?
La rosa contestó:
Es que desde que te fuiste las hormigas me han comido día a día, y nunca pude volver a ser igual.
El sapo solo contestó:
Pues claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas y por eso siempre eras la más bella del jardín.
REFLEXIÓN:
REFLEXIÓN:
Muchas veces despreciamos a los demás por creer que somos más que ellos, más bellos o simplemente que no nos “sirven” para nada. Dios no hace a nadie para que esté sobrando en este mundo, todos tenemos algo que aprender de los demás o algo que enseñar, y nadie debe despreciar a nadie. No vaya a ser que esa persona nos haga un bien del cual ni siquiera estemos conscientes.
5 comentarios:
Muy bonito Maribel...otra entrada ta bonitas como las demás
Feliz domingo...besos
Una sola flor le daría a una persona viva y mejor que el paquete completo en la tumba de...
We all Bouaziz Tunisia
saludiotssssssssss
Hola amiga.. Nadie pero nadie es
" menos " que el otro !. Tod@s
tenemos esa peculiar y mas personal valia !! Y como lo expresas ante los ojos del Señor,
somos iguales. Besos Maribel.
saluditos Emy.
Hola mi buena amiga, pasé por aquí sin apenas hacer ruido para saludarte. Muy bonita entrada y un cuento precioso, gracias por compartir. Que pases un feliz día de Domingo lleno de sensaciones positivas. Un beso desde la distancia de un amigo.
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